Los asturianos son más partidarios de controlar a sus parejas que las asturianas
Asturias no está entre las comunidades autónomas donde más arraigada está la creencia de que debe existir un control en la pareja de lo que hace el otro con su móvil y en redes sociales. Así se desprende de la encuesta elaborada por USO a través de sus Secretarías de Comunicación y Estudios Sindicales, y Formación Sindical e Igualdad, con motivo de la campaña #NoControles, para concienciar, de cara al 25N, de que el control también es violencia.
Un 23% de los asturianos considera que su pareja debe conocer las claves para desbloquear el móvil del otro y que, igualmente, está en la obligación de compartir las suyas: “un 65% de quienes opinan así son hombres, y el 60% de ellos se sitúan entre los 30 y los 49 años”, expone Laura Estévez, secretaria de Comunicación y Estudios Sindicales de USO.
Del total de asturianos que consideran que en el seno de la pareja hay que compartir las contraseñas de acceso a las redes sociales del otro, el 82% son hombres; “y también es mayoritariamente masculina la creencia de que existe una obligación de mostrar los mensajes a tu pareja en el caso de que los requiera. Aquí, todas las respuestas afirmativas son de hombres, si bien el porcentaje total de los asturianos que opina así está por debajo de los resultados a nivel nacional: un 2,3% frente al 4% de media”, continúa Estévez.
En cuanto a justificar el uso de la violencia, sea física o verbal, en el caso de no conseguir de la pareja el acceso a claves o mensajes, “en Asturias no se ha registrado ninguna respuesta afirmativa, al contrario que en el conjunto de España, donde el 1% entiende que sí puede llegarse a extremo. Además, se dan más síes entre personas sin pareja, con lo cual se demuestra que es un patrón, y no una conducta puntual, como a veces se quiere justificar con base en una infidelidad o desconfianza”, argumenta la responsable de USO.
“Con la encuesta, pretendíamos saber si existe una relación entre el control hacia la otra persona con la violencia sobre ella. Efectivamente, hemos visto cómo, según las preguntas incluían un mayor grado de acceso a la intimidad, bajaba el porcentaje de personas que veían normal el compartirlo con su pareja. Sin embargo, no solo persiste quien considera que debe haber un control absoluto de lo que hace y dice la otra persona, sino que se justifica cualquier presión para conseguirlo”, alerta Dulce María Moreno, secretaria de Formación Sindical e Igualdad de USO.
Por ello, “desde USO consideramos primordial el educar en igualdad. Por suerte, la encuesta nos muestra una tendencia al cambio en las generaciones, una toma de conciencia por parte de los más jóvenes de sus derechos individuales en la pareja. No obstante, en USO consideramos que es imprescindible que se contemple un cambio en la normativa sobre acoso para que incluya la persecución, en el seno de una pareja, para dar acceso a los datos y mensajes personales”, reclama la secretaria de Formación Sindical e Igualdad de USO.