USO, contra los últimos accidentes de trabajo mortales en Asturias

USO denuncia la poca inversión en prevención de riesgos laborales y el aumentos de los accidentes de trabajo mortales en Asturias: 3 muertos en 6 días

Tres muertes en el trabajo en dos accidentes laborales en menos de una semana en Asturias son completamente inasumibles y un indicio absoluto de que falla la prevención de riesgos. Tres muertes que vienen a ensombrecer el atisbo de mejora en la siniestralidad laboral que se observaba en el primer semestre: en seis meses habían fallecido 5 personas por causas laborales; en solo seis días, 3 trabajadores más.

La Federación de Industria de USO, y en particular la de Asturias, quiere expresar su más profundo y sincero pésame a las familias que han sufrido la desgarradora pérdida de sus seres queridos en estos trágicos accidentes ocurridos en Figareo y en El Musel. En estos momentos de dolor, queremos que sepan que renovamos nuestro compromiso de lucha por un entorno laboral más seguro, para que ninguna familia tenga que atravesar por una pérdida así en el futuro.

Por este motivo, en USO industria queremos reiterar la urgencia de abordar la prevención de riesgos laborales con la seriedad que merece. Seguimos observando con preocupación que numerosas empresas no están invirtiendo los recursos adecuados en este ámbito crucial, a pesar de que no escatiman recursos y esfuerzos por comunicar públicamente su compromiso en el terreno de la seguridad laboral.

Los fríos datos de la siniestralidad laboral

En junio, 299 trabajadores ya habían perdido la vida en accidente laboral en jornada; nada más y nada menos que un 8 % más que en el primer semestre de 2023. En el caso de Asturias, 5 habían sido las víctimas mortales.

Pero en Asturias, en menos de una semana, se han registrado dos accidentes mortales que le han costado la vida a tres compañeros: uno, en Figareo y otro, en el Puerto de El Musel.

En Mieres, un tren golpeó la grúa donde trabajaba José Manuel, de 32 años. En Gijón, otras dos grúas cayeron al mar, matando a dos operarios, César, de 23 años, y Roberto, de 49. Además, otros cuatro compañeros resultaron heridos, dos de ellos, graves.

Este panorama nos obliga a hacer una llamada a la responsabilidad. Las empresas ya deberían haber integrado la seguridad y salud de sus empleados en el núcleo de su estrategia organizativa. Un aspecto que no debe ser secundario ni motivo de escasas inversiones: cada vida cuenta, no se puede tolerar una muerte más en el trabajo.

Más prevención, más y mejores vidas

Asimismo, instamos a la Inspección de Trabajo a colaborar más estrechamente con los delegados de prevención, quienes a menudo enfrentan obstáculos empresariales significativos para acceder a la información más esencial y a desechar sus propuestas. Es fundamental que las empresas admitan que una cultura de prevención adecuada no sólo protege a sus trabajadores, sino que también evita consecuencias legales y económicas graves.

En definitiva, la prevención de riesgos laborales debe ser tomada en su justa medida: una exigencia ética y legal que debe estar en el centro de toda actividad empresarial.

Para terminar, queremos hacemos un llamamiento a todos los actores involucrados en la prevención, a unir esfuerzos para garantizar un entorno de trabajo seguro y saludable para todos.